La actriz estadounidense Lindsay Lohan se declaró inocente ante un tribunal de California tras ser acusada de robar un collar de US$2.500 en una joyería.
La policía y los fiscales afirman que Lohan se robó el collar de una tienda en la localidad de Venice, el 22 de enero, semanas después de que la expulsaran de una clínica de rehabilitación por mala conducta.
Lohan le dijo al juez de la causa que ella pensaba que el collar "era un préstamo".
Por su parte, el juez Keith Schwartz respondió a la actriz: "Usted no es diferente a nadie, así que por favor no desafíe su suerte".
Lohan abandonó el tribunal tras pagar una fianza de US$20.000.
De ser encontrada culpable, la actriz podría cumplir una pena de cárcel de hasta tres años.
Este es el caso más grave en una serie de roces con la ley que ha tenido la estrella de 24 años.
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